¿Importante Impulso Económico en Loreto?
Mario Andre López Rojas
En estos días hay algunos que creen que venimos gozando de un “Importante Impulso Económico” en la región Loreto; título bastante sugerente, positivo pero demasiado surrealista, debido a que sugiere que Loreto registra un importante impulso económico ante las cifras publicadas por el INEI con respecto a la tasa de crecimiento del PBI de Loreto para el segundo trimestre y primer semestre del 2017.
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Impulso económico, o llámese estímulo económico, se refiere al desarrollo o fomento de una actividad económica; aquí pregunto: ¿qué se ha desarrollado o fomentado dentro de la actividad petrolera de Loreto en estos últimos años? Que no sea otra cosa que la reanudación parcial del bombeo de petróleo crudo del lote 192 a través del oleoducto norperuano; dicho lote no registraba producción alguna desde marzo del 2016 hasta febrero del 2017, mes en que reanudó parcialmente sus operaciones de producción de petróleo crudo; y para julio 2017 (233 mil barriles de petróleo crudo) aún produce por debajo del valor promedio mensual registrado en el año 2015 (289 mil barriles de petróleo crudo). El tramo I del Oleoducto Norperuano reinició operaciones desde el día martes 26 de setiembre de 2017, según informó Petroperú a través de un hecho de importancia enviado a la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV). Adicionalmente, entre los años 2015 y 2016 no se ha firmado ningún nuevo contrato de exploración o explotación de lotes petroleros en la selva norte.
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El INEI indica, según su reporte del Indicador de Actividad Productiva Departamental para el segundo trimestre del presente año, que Loreto habría registrado, después de 9 trimestres consecutivos de tasas negativas, una tasa de variación positiva de 4,5% (de la cual 4,4 puntos porcentuales lo aporta el sector Minería e Hidrocarburos), lo cual definitivamente es bueno, pero si analizamos lo que hay detrás de esa cifra, podemos darnos cuenta que después de más de dos años de caídas, cualquier incremento podría dar la impresión de que estamos creciendo, lo cual en este caso no es tan cierto, ya que el índice sobre el cual se calcula está variación positiva interanual aún está por debajo del nivel alcanzado durante los años 2013, 2014 y 2015; es decir, aún ni siquiera recuperamos el nivel de producción trimestral de hace cuatro años atrás. Lo mismo sucede con las cifras de electricidad y exportaciones, las cuales tuvieron una fuerte caída el año 2016 con respecto al año 2015.
Por otro lado, si revisamos las cifras de recaudación tributaria en Loreto, para el segundo trimestre del presente año se redujeron en 12,2%, con lo cual acumulan una caída de 24,5% (S/ 48,6 millones de soles menos) en el primer semestre del año 2017 comparado con similar periodo del año 2016. En ese mismo sentido, el valor de la producción agropecuaria acumulada a julio 2017 ha caído 0,8% y; la producción de madera aserrada ha caído en 28,7%. Asimismo, el saldo de los créditos en Loreto, al mes de julio 2017, registra tasas negativas de crecimiento por tercer mes consecutivo; mientras que, los saldos de depósitos registran 9 meses consecutivos de tasas negativas de crecimiento. La tasa de morosidad del sistema financiero de Loreto se mantiene como la segunda más alta a nivel nacional. El empleo formal en empresas de 10 a más trabajadores de la ciudad de Iquitos registra en julio del 2017 una caída del 5,8%, con lo cual acumula 37 meses consecutivos de tasas negativas.
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De todo lo anterior descrito, podemos darnos cuenta que no hay nada que celebrar, al contrario, hay mucho por hacer para revertir el resultado negativo de todos aquellos indicadores aquí mencionados; celebrar esa tasa de 4.5%, es como celebrar el hecho de que en el índice de competitividad regional calculado por el IPE, Loreto dejó de ocupar el último lugar y ahora se ubica penúltimo, solo superamos a Cajamarca, pero no porque hayamos mejorado realmente, sino porque Cajamarca registra mayor deterioro en sus indicadores.